Análisis Worms Reloaded

Worms es una saga con algunos años a cuestas, tiempo en el cual ha ido cambiando en cuanto a su forma mas no en su fondo, pues desde que apareció en el año de 1995, team17 nos trajo consigo una versión bastante caricaturesca y cómica, que en realidad encierra un juego de táctica y estrategia que resulta muy  divertido gracias a los graciosos gusanos que son los grandes protagonistas y que dan nombre al título que analizamos en esta ocasión.

Worms Reloaded

La mecánica de Worms es bastante simple, contamos con un grupo de gusanos a los que movemos dentro de un escenario destructible, cada equipo tiene clara misión de acabar con todos los otros gusanos que no pertenezcan a su bando, con la particularidad de que toda la acción tiene lugar por turnos, haciendo de este un título muy estratégico, pues debemos planear muy bien cada uno de nuestros movimientos y las armas que usamos y pensar en las consecuencias de cada una de nuestras acciones. Y si bien parece ser un concepto bastante complejo e incluso serio, todo queda balanceado gracias a su estilo desenfadado que lo caracteriza. Y es que los gusanos a los que controlamos le otorgan a Worms un estilo mucho más cercano a las caricaturas o a los dibujos animados, característica que le ha ayudado a convertirse en un título clásico dentro del género de la estrategia.

Desde su primera entrega en la década de los noventa, Worms ha aparecido en distintas versiones, y las ediciones más recordadas son las de Worms Armageddon y World Party, en las que se perfeccionó su concepto tanto visual como estratégico, para ofrecernos uno de los mejores juegos de estrategia en dos dimensiones. Luego esta franquicia intentó sin mayor suceso llevar su mecánica hasta las tres dimensiones, pero nunca llegó a tener el mismo éxito que su antecesor. Finalmente, este Worms Reloaded llega como una revisión de sus entregas más laureadas, tomando su mecánica de dos dimensiones, pero con una mejora gráfica muy buena, que bien se podría calificar como un Worms en HD.

Editor de niveles

Por lo demás, el juego mantiene sus mismas características, permitiéndonos personalizar a nuestro equipo de gusanos, con sus siempre interesantes frases, sus lápidas y nuevas modificaciones como el color de su piel o sus cascos  de combate. Además, como ya es usual, se incluye un completo editor de niveles, con lo que podemos crear escenarios rápidamente, incluyendo un generador automático de niveles. Gráficamente el juego se mantiene fiel a su estilo, pero con evidentes mejoras, incluyendo efectos visuales y animaciones mucho más nítidas y fluidas.

Algunas de las armas disponibles

Del lado de las armas regresan las más célebres como las ovejas, la santa granada, los misiles teledirigidos y los ataques aéreos y se aumentan algunas nuevas como las torretas, los imanes o los búfalos. Así mismo, la física con la que se comportan los misiles y granadas también cambia un poco, por lo que es necesario acostumbrarse a una mecánica ligeramente diferente, que sin embargo sigue siendo bastante simple y fácil de entender.

El factor más divertido y atractivo de esta edición recargada sigue siendo su modo multijugador, ya sea localmente o a través de internet, en el que podemos pasar horas de horas en partidas que siempre resultan agradables y en ocasiones,  muy competitivas. Dependiendo del número de equipos de la partida, y gracias a las poderosas armas que caracteriza a esta saga, podemos reventar el escenario con tantas explosiones, con resultados hilarantes, gracias a la personalidad propia que tiene cada equipo de gusanos, incluyendo sus propias frases, movimientos y demás elementos visuales. Como ha sido costumbre, el apartado multijugador sigue siendo la gran fortaleza de este título.

Sin embargo, cabe señalar como algo negativo el evidente estancamiento de esta franquicia, pues no ha mostrado mayores cambios o novedades a lo largo de su historia, y desgraciadamente este título sigue el mismo patrón. De ahí que solo se pueda hablar de una mejora a nivel visual y estético, mientras su mecánica de juego se mantiene casi intacta, con unos pequeños retoques que parecen no ser suficientes para hablar de un producto mucho más innovador y original.

A pesar de esto, creo que Worms Reloaded ofrece una  experiencia que puede resultar atractiva si lo que buscan es un juego de estrategia no tan serio ni tan complicado como podrían ser otros títulos. El hecho de jugarse enteramente en dos dimensiones le aporta también un carácter diferente, que sin embargo es muy accesible para los menos expertos. Y lo mejor de todo sigue siendo el juntar a un grupo de amigos y sentarse a jugar, ir creando cada uno su equipo y personalizarlo a su gusto y después escoger un mapa cualquiera para medirnos en tan peculiar campo de batalla.